Recientemente, se ha declarado en emergencia el río Cañete debido al considerable retraso de los avances físicos de los trabajos de protección contra inundaciones por parte de las empresas que ejecutan las obras, los que además ya han sido afectadas, por el aumento de las aguas que incluso causaron alerta afectando maquinaria y materiales que se utilizan. Las poblaciones dependen del enrocado para proteger sus terrenos de cultivo y viviendas, especialmente con la temporada de lluvias acercándose. Han destacado que, tras muchos años desde el enrocado inicial existente, en algunos sectores se han retirado las rocas mientras que en otros están en la intención de hacerlo, aumentando la vulnerabilidad de la zona ante desastres naturales, debido a la situación como se presenta en la actualidad. VECINOS DE MAL PASO LOS PRÓXIMOS AFECTADOS Tal como sucedió con los pobladores de la Asociación de Productores “La Sed” del distrito de Nuevo Imperial, meses atrás, ahora moradores del sector Mal Paso, del distrito de Lunahuaná, se encuentran próximos a ser afectados por la ejecución del proyecto denominado “Creación del Servicio de protección contra Inundaciones del Río Cañete en los distritos de San Vicente, Nuevo Imperial y Lunahuaná” que lleva a delante la Presidencia del Consejo de Ministros, a través de la Autoridad Nacional de Infraestructura ANIN, para lo cual suscribió un contrato con la contratista Obrascón Huarte Lain S.A. (OHLA). Esta zona de agricultura ribereña de pequeños agricultores que va a ser afectada con la destrucción de terrenos de cultivos, que datan de más de 40 años y que son, en gran medida, el sustento de las familias. Se encuentran sorprendidos, debido a que han recibido la comunicación de la ANIN firmada por Erick Daniel Monzón Castillo, Director de la Dirección de Gestión Predial; en donde se les pide que brinden su “apoyo y colaboración brindando las facilidades con el objeto de efectuar las labores propias del proyecto de defensas ribereñas y encausamiento”; dicho en palabras sencillas, quitarles terrenos de cultivos que manejan cotidianamente para la producción agrícola.