Muchos de nosotros seguimos absortos, como nos cuentan de los enredos en los que estuvo el Sr. Otárola. Muy pocos nos damos cuenta de que éste hecho picaresco y amoroso ocurrió en 2021. Vale decir hace tres años.

Las agrupaciones políticas y los medios de comunicación masiva, principalmente capitalinos, nos levantan la información y nos inflan los hechos, para despertar la expectativa, de algo que es importante por lo fraudulento, pero tambien dejamos de interesarnos en otros asuntos importantes.

Hay algunos medios masivos, sean escritos, radio TV, que hacen una novela turca de los amoríos de una joven que quería conseguir trabajo y, probablemente cedió algo, con el fin de obtenerlo. Obviamente lo ilegal está en conseguir esa chambita, con la retribución pecuniaria obtenida con plata de los peruanos. Pero ella tiene una pequeña parte, el mayor porcentaje lo tiene don Alberto Otárola.

¿Pero, porque se esperó tres años para la denuncia? Aquel buen ciudadano, honesto y moral que tuvo la información, ¿por qué no la soltó de inmediato? ¿Acaso esperaba el momento oportuno para hacerla explotar y lograr encubrir otros?

Algunos sostienen que estos datos los tenía de antemano Gorriti, ahora en problemas con la fiscalía y que sería uno de los interesados. Otros aducen que el que soltó la información es el hermano de la Presidenta Dina, porque quiere quitarse del frente al Premier, que ocupa un cargo importante y no lo deja en Libertad para hacer otras cosas mayores.

Otro sospechoso es el señor Vizcarra, cuya situación en el ambiente judicial está bastante ardiente y quisiera que la ciudadanía no preste atención.

A él le convendría que todos miremos a otro lado y lo dejemos libre de toda observación.

No olvidemos que Toledo, aunque muy silenciosamente, está siendo procesado y es alguien que requiere de todo aquello que distraiga a la opinión pública.

No hay que descartar tampoco a los famosos fiscales anticorrupción, Vela y Pérez, cuya voz era como la de Dios. Sus acusaciones deberían ser creídas a pie juntillas, pero que solo han logrado que se indemnice a Odebrecht y que no devuelva nada al Estado Peruano.

La novela de hoy es: Alberto y Yaziré. Nadie sabe en cuántos capítulos se escribirá ni cuál será su futuro. A pesar de haber sido escrita hace más de tres años, ha logrado atraer audiencia y todos esperamos saber más del próximo capítulo. ¡No deje de verla!