Ni la Municipalidad Provincial de Cañete quien el año pasado a inicios de su gestión José Alcántara prometió dar solución a sus problemas y posó solo para las cámaras en un disfrazado intento por figurar, lo mismo con el alcalde Distrital de Lunahuana Luis Conislla Jara “Chabelón” quien hasta ahora guarda un silencio cómplice ante probadas irregularidades de su antecesor en la construcción de ese puente que hoy se cae a pedazos y que ha dejado aislado a todo un pueblo que ahora deben arriesgar sus vidas al cruzar el río Cañete valiéndose solo de palos ante una corriente creciente que cada día lo vuelve más difícil

Nadie propone solución ni el gobierno regional que dispone recursos para prevención y que literalmente “se lo lleva el agua” y tampoco ningún gobierno involucrado, mientras la desidia impera la población de Ramadilla sigue a su suerte con autoridades que quizás esperan a que ocurra lo peor para recién empezar a “figurar”