INFORMACIÓN Y MÁS INFORMACIÓN.
No sé quiénes serán los asesores de la presidenta Dina Boluarte, en lo que compete a la información nacional e internacional.
Parece que no hacen un buen trabajo o no hacen nada bueno. Falta conocimiento de la ley y la constitución en el peruano promedio.
Muy poco nos gusta leer para informarnos.
La mayoría de los peruanos, y creo que es así en Latinoamérica, nos gusta enterarnos de oídas. Nos agrada más el chisme que buscar la verdadera fuente de la noticia. Incluso en los medios de comunicación, especialmente los radiales o televisivos, sacrificamos la verdad por la primicia. En muchos casos, y también ocurre en nuestra provincia, queremos ser los primeros en lanzar un dato, aunque no se haya confirmado.
Es una pena, pero somos así. Y no es algo aislado, eso tiene su raíz en que los peruanos tenemos un bajo índice de comprensión lectora, por eso se nos hace difícil leer, porque nos cuesta entender lo que leemos. Más fácil es confiar y creer lo que nos dice la gente, en demorarme y pensar si aquello es verdad.
Hemos visto en la televisión que algunos marchan gritando algo y no saben si tiene sentido lo que grita, o está acorde a lo que quiere.
Le resulta más fácil entonces, creer lo que dice porque si piensa, de repente vaya a darse cuenta de su ignorancia o su error. Lo vimos cuando entrevistaron a un marchante sobre la constitución que quiere y sólo respondía incoherencias.
El sujeto pensaba que la nueva Constitución debería tocar temas contra “los cuellos blancos”, el “grupo Romero” y otras cosas que obviamente no van en una Constitución.
Tampoco saben el proceso que debe seguirse para que se haga una nueva Constitución. Creen que se puede lograr en un corto tiempo y que le va a solucionar sus necesidades.
Los que postulan una nueva Constitución todavía no mencionan que capítulos y artículos tendrían que reformularse y, que detrás de su redacción, existe innegablemente una línea política, que cambiará o ratificará una vida en el Estado. Queda claro que si quiere hacerse una nueva Constitución, tendría que ser contraria a la que existe, porque ésta no le es útil.
El razonamiento de los opositores a la democracia, aunque la usan para sus fines, quieren que la Presidenta se vaya por “asesina”. No es “Dictadora” ni “golpista”. ¿Acaso no ha sido Pedro Castillo y Aníbal Torres quienes promovieron el enfrentamiento entre los peruanos, con mentiras? ¿Acaso no son los congresistas de izquierda que quieren que se adelante las elecciones si ponen allí una consulta popular para una nueva constitución?
Por muchas cosas más, al ejecutivo le falta una mejor política comunicativa con su pueblo y con los vecinos de otros países, e incluso de Europa y américa del norte. No es posible que la gente en nuestro país, marche repitiendo o pregonando mentiras, pero por falta de información. No es posible que varios países vecinos estén de acuerdo que pedro Castillo está preso injustamente.
Nunca es tarde para mejorar esta situación y, seguramente muchas personas regresarían a sus casas y abandonarían las marchas, que mucho daño hacen, especialmente a los más pobres.