CONFRONTACIÓN TOTAL...
En mi opinión, obviamente provinciana y sin más argumentos que el sentido común. Ya el Ejecutivo con el Presidente Pedro Castillo a la cabeza, se ha lanzado a liberarse de la oposición legal, suponiendo como cierta, que ya el Congreso recibió el impacto de la “primera bala de plata”, ante la negativa del pedido hecha por el ex Premier Aníbal Torres.
Supone que tiene la razón al aceptar una negativa de facto y, por lo tanto, tiene vía libre para otro pedido de confianza del nuevo gabinete y, que pone como Premier, a una ministra que ya anteriormente fue censurada cuando ejercía el Ministerio de Trabajo.
Obviamente es toda una provocación, que ya lo hizo anteriormente al ponerla nuevamente en el Gabinete del señor Torres y, que el Congreso dejo pasar, por ser un Ministerio diferente. Ahora se nota claramente la estrategia que ya está siguiendo el Presidente Castillo, para quitarse de encima al Congreso, supuestamente aplicando el poder que le da la Constitución.
No hablemos de asuntos personales, que no interesan a éste periodista, es bueno saber que la actual Premier, es de un carácter bastante fuerte y de ideas claras. Siempre ha demostrado ser muy estudiosa y que conoce su profesión de abogado. Ha sostenido en diferentes oportunidades, que aunque no es de Perú Libre (el Presidente ahora tampoco lo es), tiene esas ideas y las defiende.
De acuerdo a los medios de comunicación, podemos saber que tiene 32 años y ya desempeñó la Cartera de Trabajo y Promoción del Empleo, en una primera instancia y, luego, hasta hace unos días, reemplazó al ex ministro Salas en la cartera de Cultura. Actualmente, además es Congresista de la República representando a Tacna.
Suponemos que la confrontación cada vez será mayor entre ambos poderes. Cada quien quiere imponer sus argumentos y la crisis será más aguda, aunque hayan venido los enviados de la OEA, que al final no pasarán de sugerencias para un mejor ordenamiento y pedidos de acuerdo entre las partes, lo cual parece que es muy difícil de llegar.
En todos los discursos del Presidente, al igual que del ex Premier, siempre sembraba el enfrentamiento entre provincianos y capitalinos, ricos y pobres, pasado y presente. No se promueve un camino de paz o armonía entre los peruanos. Sigue con el discurso sindicalista, sin que haya atisbo de tranquilidad, si no se hace a la manera del ejecutivo.
Es una pena que no se gobierne como estadista. Es un riesgo que la población cada vez deje de tener una luz de esperanza, sin darnos cuenta que el hambre y la delincuencia estará por sobre el camino del progreso y la superación.
Acaso, ¿Llegaremos a una confrontación donde tenga riesgo la vida? Creo que nadie quiere eso. Es momento de pensar en los principios humanos que a todos o a la gran mayoría ayuden a salir de la miseria y la corrupción que nos envuelve.