(“pucha”: Esta palabra peruana se utiliza cuando quieres decir que tienes una molestia, inconveniente, fastidio…). Hago la aclaración, antes de entrar en el tema, porque algunas personas vayan a darle o tomarlo en otro sentido.
Año y medio de éste gobierno y no sabemos hacia dónde vamos. Antes lo defendían señalando que “recién tiene tres meses y ya quieren resultados”. El presidente y sus ministros decían: “la oposición no lo deja trabajar”-. Otros defensores decían: “El Congreso lo quiere vacar”.
La Fiscal de la Nación, empezó a escarbar sus contradicciones presidenciales y, encontraron una serie de indicios para investigarlos y, que a pesar que la Constitución Nacional lo preserva de una acusación directa, si se investigó y, encontraron que no sólo la familia sino los amigos y paisanos, están de plácemes con los dineros del Estado (de todos nosotros), se lo repartían.
En algunas oportunidades a través de jugosos contratos con beneficios para los amigos, otras veces a través de puestos de trabajo en los diferentes ministerios, que más parecían agencias de empleo que Ministros y ministerios responsables de la meritocracia, la cual desapareció de sus requisitos. Había colegas profesores que ocuparon ministerios, como si fueran “sabelotodo”.
Desde el Primer Gabinete se notó la incapacidad y la falta de independencia para definir a personas idóneas en los cargos, colocando a exguerrilleros y personas incapaces. El partido Perú Libre exigió que sus huestes asuman el gabinete y otros cargos importantes. El partido de Verónica hizo lo mismo y, los otros aliados, igual reclamaron su participación.
Reiterados encontronazos con la Fiscalía, que encontró tantas evidencias y denuncias, que tuvieron que abrirse seis denuncias sobre “asociación para delinquir”, “jefe de una red criminal, con todos sus familiares comprometidos”, con su cuñada o hija adoptiva retenida por 30 meses. Con cuñados y paisanos con impedimento de salida del país.
Declaraciones que denotan a un personaje desconocedor verdaderamente de la Constitución Nacional o de las reglas y normas básicas para un dignatario nacional, hace que nos preguntemos, más de una vez, ¿dónde está el piloto de nuestro país? ¿Cuándo se rodea de personas idóneas para gobernar?
Declaró que sólo iba a cobrar su sueldo de profesor, cuando asuma el mando de presidente, ¿Alguna vez lo hizo? Dijo que “el palacio lo convertiría en museo” ¿Acaso no sabía esa es la Casa de Gobierno? Criticó y habló pestes del avión presidencial, ahora usa los aviones de la FAP, para cargar a su familia y amigos. Cuando se dio cuenta que podía vacarlo, empezó a comprar los votos de congresistas corruptos, que son fácil de encontrar en nuestro país.
Le censuran a sus Ministros incapaces y el Presidente los pone de funcionarios en otros cargos. No tiene el asesoramiento debido para dirigir la política internacional y escoger a los gobiernos amigos, en concordancia con lo que la Geopolítica aconseja, ganándose el país, malas relaciones con países amigos, o con quienes no hay razón para enemistarnos.
Estamos con una inseguridad cada vez mayor, la salud está por los suelos, nuestra minería se arrastra y todo gira en torno a una politiquería barata. ¡Pucha! ¿dónde está el piloto?