A una semana del derrame de petróleo en Ventanilla, no solo están viendo los efectos en el litoral peruano sino también en las actividades económicas que se desarrollaban en las playas afectadas, entre ellas la pesca.
"El daño ya está hecho, por lo menos va a demorar tres años en que se pueda reparar. Afecta económicamente en esta temporada de verano porque nosotros duplicamos nuestros ingresos en verano y también afecta a la cadena de negocios, los transportistas y otras actividades", comentó Roberto Espinoza, presidente del gremio de pescadores de Pachacútec-Callao.
Solo en el caso de la pesca, el gremio de pescadores señala que antes ganaban entre S/ 100 y S/ 700 diarios, dependiendo de su modalidad y "de como esté la pesca en cada lugar".
Durante la temporada de verano los pescadores tinteros registraban ingresos de entre S/ 100 y S/ 250, mientras que los rederos podían ganar entre S/ 300 y S/ 700.
"En verano se duplica porque las gente viene a las playas y los restaurantes duplican su inversión", comentó Espinoza.
Respecto al bono que se está evaluando y las canastas que fueron ofrecidas por Repsol, señaló que es un apoyo de inicio, pero no suficiente para remediar la situación.
"Nos sentimos mal porque (las canastas) era poco para remediar lo que ganamos diario, pero necesitábamos sí o sí que nos den algo para poder llevar a casa", puntualizó.
El representante de pescadores señaló que en los primeros cinco días desde el derrame de petróleo no fueron atendidos, y recién el fin de semana se les entregó un vale y una canasta.
Espinoza agregó que la posición que del gremio es que Repsol actúe de inmediato y pueda limpiar el mar que ha sido afectado y cumpla con otorgar la indemnización correspondiente.